La educación en el arte para normalizar la situación
Isabel Durán
A pesar del esfuerzo ímprobo que está realizando el sector del arte contemporáneo desde hace décadas, todavía estamos sufriendo con intensidad la anomalía que supone la falta de comprensión y respeto por parte de ámbitos de relieve en nuestra sociedad. Llegará algún día en el que el arte contemporáneo se perciba como algo directo y próximo, como algo que forma parte de todos y, lo más importante, que es de todos y para todos. Pero hay que seguir trabajando por ello.
Desde el nacimiento del IAC, la asociación está poniendo en marcha mecanismos que acerquen ese día. Es destacable en estos últimos tiempos el importante trabajo que está haciendo la Mesa Sectorial del Arte Contemporáneo en la concienciación de los partidos políticos sobre sus responsabilidades sociales con este tema. Desde las distintas delegaciones que tiene el Instituto en el Estado se está llevando a cabo una labor ejemplar también en ese sentido. El trabajo que llevamos a cabo es ingente pero...
Una de las tareas en las que es decisivo seguir insistiendo es en la EDUCACIÓN, que es la base de cualquier sociedad y el punto de partida que asegura un futuro más prometedor que el presente que tenemos.
Tras el excelente trabajo que supuso la publicación de El arte como criterio de excelencia, a cargo de Juan Luis Moraza y Salomé Cuesta, que explica las posibilidades del modelo ARS (Art, Research, Society) en el proceso de modernización y mejora de las universidades, en estos momentos estamos ultimando un curso de formación de profesorado. El objetivo es conseguir llegar a los maestros y profesores hablándoles de tú a tú, haciéndoles ver que el arte contemporáneo es una herramienta básica y eficaz para la formación de sus alumnos en todas las materias del curriculum y que de lo que verdaderamente habla el arte es del mundo que vivimos.
Acercar los maestros al arte actual supone, en la mayoría de los casos, cambiar sus miradas para eliminar prejuicios, pero también el descubrimiento de otra forma de educar. Una vía para que tanto maestros como alumnos desarrollen una forma crítica de opinar, de discutir y, finalmente, de construir el mundo que se abre en el futuro.
Poco a poco…, ¿seremos capaces de deshacer la anomalía que padece nuestra sociedad?