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Exposición “El Gran Experimento” de Miguel Ángel García, en el Observatorio del Arte de Arnuero

Miguel Ángel García. "Bajo los árboles".

La exposición "El Gran Experimento. La esclavitud antes y ahora" del artista visual Miguel Ángel García, puede visitarse en el Observatorio del Arte. Ecoparque de Trasmiera, Arnuero, Cantabria.

Hasta el 30 de septiembre de 2023.

Horario: martes a domingo de 10 a 14 y de 17 a 20 horas.

La expansión imperial europea durante la Edad Moderna se basó en buena medida en la implantación de una economía esclavista global. Esta aberración empezó a ser cuestionada a partir de la Ilustración y la Declaración de los Derechos Humanos en el seno de las mismas potencias coloniales. Y el primer paso efectivo hacia la abolición tuvo lugar en 1834 en un remoto rincón del imperio británico: Isla Mauricio. Ese "gran experimento" ha inspirado el proyecto de Miguel Ángel García, que se presentó en la Biblioteca Central de Cantabria (Santander), en el Museo Nacional de Antropología en Madrid y ahora recala en el Observatorio del Arte de Arnuero en Cantabria.

Las obras que forman parte de este proyecto ponen de manifiesto las contradicciones que se podían producir entre la belleza de los paradisíacos paisajes isleños del Índico y el infernal trato infrahumano que unas personas podían llegar a infligir a otras. Miguel Ángel García también llama la atención sobre la lentitud a la que luego se desarrolló este proceso de abolición de la esclavitud pese a sus prometedores comienzos, pues el poderoso sistema colonial global se resistía a su desaparición. En algunos países, la derogación de las leyes de raigambre esclavista no se ha producido hasta hace poco, y en muchos aún siguen en vigor "de facto".

CLOSING TIME. Pigmented inks print, variable sizes.

De hecho, desgraciadamente la esclavitud no ha desaparecido por completo y subsiste bajo nuevas formas, normalmente ilegales, pero en cualquier caso, toleradas. Las cifras y los ejemplos que finalmente recoge este proyecto nos interpelan y nos hablan de la magnitud del problema en pleno siglo XXI. Es duro comprobar que existen personas sin derechos ni libertad en prácticamente todos los países del mundo, y están más cerca de lo que creemos. Esperamos que esta exposición contribuya a darles visibilidad.

Si a una persona se la saca de su lugar y familia de origen, se la lleva a otra parte, se la convierte en mercancía para terminar siendo fuerza de trabajo, se le cambia el nombre, se le asigna un dueño… Si resiste, sabe que sus hijos serán propiedad de su dueño y que probablemente se venderán a otros que ejerzan la misma forma extrema de dominación y poder de un ser humano sobre otro, serán personas esclavizadas. Sobre ellas, la fuerza se convertirá en un derecho y la obediencia será su deber.

Cuesta creer que la esclavitud exista desde los albores de la humanidad, desde el mismo nacimiento de los primeros grupos humanos. Y aún más, que se haya producido y siga produciéndose en casi todos como parte constitutiva de sus desarrollos. En el marco actual de nuestra sociedad occidental, habiendo creado La Declaración Universal de los Derechos Humanos por la que deberíamos regir nuestras sociedades, convivimos con una esclavitud nada oculta, al tiempo que la denostamos y reprobamos abiertamente.

SLAVE SHIP. Pigmented inks print on aluminum, 100 x 125 cm.

¿Cómo puede ser? Miguel Ángel García, con valiente determinación, nos acerca a esta realidad a través de "El Gran Experimento", un término que reproduce literalmente el que se empleó en la isla de Mauricio, dominio colonial de Gran Bretaña en 1834, como ensayo para terminar con la esclavitud.

Se trata de un proyecto artístico que lo analiza críticamente trazando el relato de vida de los coolies -que provenían principalmente de India-, personas transportadas por mar a la isla de Mauricio para hacer trabajos forzados sin salario en el cultivo de la caña de azúcar durante varios años a cambio de obtener el estatus de persona libre. El viaje, el trabajo, sus casas y, en suma, el entorno en el que desarrollaban sus vidas, son el núcleo en el que García basa su interés para traer a nuestras conciencias la certitud de que una de las deudas con las que nacemos los seres humanos es reconocer a las personas esclavizadas como personas plenas, algo que no pudieron y no pueden ser durante sus vidas.

Esta exposición es un homenaje a quienes nunca existieron socialmente, un tributo a quienes no existen ahora, y la expresión del deseo de que una herramienta tan poderosa como es el arte sea capaz de hacernos comprender cómo somos.

Isabel Durán, comisaria.

Más información en www.miguelangelgarcia.info