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“La trayectoria del impulso en un solar azul " de Sofía Táboas

“La trayectoria del impulso en un solar azul " Sófia Táboas

Dónde: en el jardín Estética Masiva

Hasta el 19 de Marzo.

Visitas: previa cita en el teléfono: 91 0524055

 

Admiradora de las corrientes minimalistas surgidas en los Estados Unidos en la década de los 60, Sofía Táboas, desde el principio de su ya dilatada carrera, manifiesta una personalidad que la va distanciando de los artistas más representativos de esa generación. Su interés y un gusto manifiesto por los materiales cercanos a su devenir diario, más dúctiles y menos fríos que los habituales en las obras íconos de aquel movimiento, comienzan a forjar su identidad.

Sus primeros trabajos en la década de los noventa manifiestan esa debilidad por los materiales orgánicos. Son obras que incluyen dulces tradicionales mexicanos y bisutería popular. Esto nos da las claves de lo que es y será su trabajo.

Pero, como bien dice Patrick Charpenel en el texto con motivo de su muestra en el Museo de Arte Carrillo Gil en el año 2011, Sofía no crea objetos sino significados.

La artista busca resaltar la belleza visual de diversos materiales, de gran poder visual y atractivo, para crear obras que propicien trascender esos aspectos y que el espectador reflexione sobre sus campos semánticos y usos sociales y culturales.

Pero cultura es contexto, y contexto es lugar, lo que provocará que la artista asigne importancia a la situación espacial de los objetos o materiales elegidos, en base a sus poderes visuales.

A partir de ese momento, cuando se trate de plantear un proyecto, entre sus objetivos estará que el espectador experimente ese lugar en el que se insertan; es decir, no colocará sus obras en el sitio, sino que estas harán el sitio.

En esa dirección llega el nuevo desafío al que la artista se enfrentará cuando se encuentre in situ frente a 8 majestuosos pinos de un jardín.

Lo imprevisible forma parte, contradictoriamente, de lo previsible en la obra de Sofía. Aunque ella parte de dos certezas, un espacio y unos materiales, las primeras ideas generadas en su cabeza no han de coincidir necesariamente con la idea definitiva.

Dos nuevos elementos hacen su aparición y tendrán una notable influencia en el resultado final. Por un lado, la toma de posesión del lugar, o lo que es lo mismo, el reconocimiento del espacio; y por otro, el proceso de trabajo. Ambos condicionantes pueden producir obviamente sorpresas y cambios de rumbo.

La artista se verá envuelta a partir de ese momento en un viaje a lo desconocido, cuyo final es impredecible. Una vez que Sofía haya dado por concluido su trabajo, sólo una experimentación de ese lugar resolverá el enigma que la artista nos propone.

Dónde: en el jardín Estética Masiva.

Hasta el 19 de Marzo.

Visitas: previa cita en el teléfono: 91 0524055